
MIERCOLES 13 DE ENERO DEL 2009.
El Lunes 11 de los corrientes, la LVIII Legislatura del H. Congreso del Estado, le otorgó la presea “Héctor Victoria Aguilar”, a la LAE María Alicia de Guadalupe García Gamboa, por su destacada labor en beneficio de la sociedad, especialmente de los sectores menos beneficiados.
Alis, como de cariño la conocen y le llaman los yucatecos, es de los casos en que uno dice que nadie mejor que ella para recibir una presea por su labor altruista.
Nacida en el seno de una familia importante económica y social, tenía y tiene todo para disfrutar la vida en cosas más ligeras y sin embargo desde muy joven acreditó que su vocación era servir a los demás.
No solo en Yucatán sino en diferentes lugares se apreció su presencia y su entrega total en ayudar a los más necesitados y en el Estado, su actividad y preocupación la llevó a dirigir diferentes organismos dedicados todos a la actividad benéfica. Su comunicación con los grupos organizados para estas tareas, hizo que en varias ocasiones los partidos políticos exploraron la posibilidad de postularla a algún cargo de representación popular, aunque desde siempre ella y su familia tienen definida su ideología partidista y su partido, que la buscó en repetidas ocasiones para fortalecer su imagen, sobre todo en la ciudad de Mérida.
Alis siempre ha sido una persona muy respetada, estimada y admirada, sabe hacer amigos y el evento dio la oportunidad de mostrarlo, ya que entre los asistentes, muchos, se vio a personajes de ámbitos muy distintos como Políticos, Presidentes Municipales, Empresarios, personas que difícilmente se les ve en el recinto del Congreso en alguna otra ocasión, no solo atendiendo una invitación de la Legislatura, sino con particular atención y entusiasmo, siguiendo su discurso en el que mencionó su fe en Dios, en su religión y en algo que muchas veces se les olvida o manejan con discreción los que manejan asuntos públicos, que es el amor, amor a sus semejantes, amor a la tarea que hacen, amor en la Patria y amor por el futuro.
Allí presentes, sus familiares, entre ellos sus hijos a los que puso como testigos de su comportamiento familiar, que muchos yucatecos conocemos por ser una figura relevante en las actividades públicas que desempeña.
Algunas veces, los premiados dividen las opiniones de la sociedad, algunos creen que lo merecen y otros no y algunos más ponen en duda sus méritos. En este caso, es casi unánime la opinión de que nadie mejor que Alis para recibir esta presea.
Su trayectoria personal, la familiar y la pública, es de todos conocida, sabemos que dejó a un lado los beneficios de pertenecer a una familia acomodada y socialmente destacada, para convivir con los que la necesitan.
Felicidades Alis, muy merecido reconocimiento y como te dije cuando te felicité personalmente, muy merecido y a seguir adelante. Muchos mexicanos necesitan de tu vocación y de tu entusiasmo. La cola para felicitarla fue muy larga, todos querían hacer presente su reconocimiento a su tarea y eso fue una demostración del afecto que se le tiene a María Alicia de Guadalupe García Gamboa.

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